Un monumento notable en este pueblo es su magnífico Calvario, situado en un pequeño cerro de 470 metros de altura.
Bordean de trecho en trecho el camino, que sube en espiral, rodeando el monte, catorce peirones, representando las catorce estaciones del Vía-Crucis, que el pueblo recorre lleno de emoción, sobre todo en Cuaresma y en Semana Santa.
En su cima, coronada de pinos, se eleva la capilla del Santo Sepulcro, cuya sagrada imagen, estátua yacente de Cristo Nuestro Señor, fué trabajada en Olot.
La capilla, edificada no se data cuando, contó con la colaboración de D. José Pardo Sastrón (ilustre botánico), la cual consistió en el plantado de diversas espacies arbóreas en el cerro.
De escasas dimensiones pero rodeado de un bonito entorno de pinar y jardines muy bien cuidados. Ademas nos encontraremos con paneles de información sobre las plantas que se encuentran en el calvario y sobre los senderos del mezquín y de aragón.